Marzo. Basta con que esta palabra aparezca en alguna conversación para que el pulso se acelere, el pecho se apriete un poco y las miradas bajen al piso. Porque claro, cuando se está disfrutando de unas semanas de descanso, en total relajo, esa palabra es como un golpe de realidad. Puede quien este mismo instante estés leyendo este blog en la playa, disfrutando del sonido de las olas, con el sol en tu frente, en un estado de relajo infinito. Lo que menos quieres es pensar en la vuelta al trabajo. Nosotros tampoco queremos estresarte con este tema… ¡Todo lo contrario! Lo que más deseamos es que, al volver a tus labores, esa sensación de tranquilidad y felicidad te acompañe el mayor tiempo posible. Es por eso que hoy queremos plantearte formas fáciles de evitar el estrés laboral post-vacaciones. Te entregaremos consejos útiles y sencillos de realizar para que tu vuelta al trabajo no sea motivo de ansiedad en tu vida. Para conocerlos, te invitamos a seguir leyendo, porque te daremos 10 claves para que puedas cerrar bien tus vacaciones y volver a la oficina con el mejor de los ánimos.
¿Sabías que el estrés y depresión durante las vacaciones existen y son bastante comunes? Un artículo de Mayo Clinic menciona la importancia de prevenir estos síntomas tomando el control de los factores que pueden ser gatillantes de estas sensaciones en nuestras vacaciones. Queremos plantear soluciones para que, efectivamente, puedas tomar las riendas de la situación y evitar el estrés que está relacionado al fin de tu periodo de descanso y entrar nuevamente a trabajar.
Te recordamos que en Ubinn somos Innovación centrada en personas, y lo que más nos interesa es que puedan desarrollarse íntegramente en todo ámbito con nuestra ayuda. Hoy, les entregamos estas claves para tener un desarrollo laboral óptimo luego de estar algunas semanas desconectados del trabajo. Para conocerlas, solo sigue leyendo.
Para hacer durante vacaciones: 4 claves para bajar la ansiedad por volver a trabajar
¡No te asustes! No queremos quitarte parte de tus vacaciones pensando en el trabajo. ¡Al contrario! Queremos darte herramientas para que tus niveles de ansiedad no suban más de lo necesario y puedas disfrutar tu tiempo de descanso de manera plena. Y como todo tiene un antes y un después, aquí te presentamos 4 claves para preparar esa vuelta a las responsabilidades para que no tengas niveles de estrés excesivo cuando llegue ese día.
- Nivela tus expectativas
Lo primero y lo más importante es ser realistas con respecto a la situación. No te diremos que es posible que conserves el ánimo de las vacaciones porque la verdad es que cambiarás radicalmente de ambiente y eso tendrá un efecto en ti. Un cierto nivel de presión es aceptable y, hasta cierto punto, deseable. Esto porque necesitamos un poco de adrenalina que nos ayude a partir los motores y poner en marcha el trabajo. Lo importante es que mantengamos esas emociones a niveles tolerables y sanos para nuestro desarrollo profesional.
Entonces, cuando veas que la fecha de volver a tus labores se acerca, no pienses que el relajo de las vacaciones te durará lo suficiente como para tener unas primeras semanas tranquilas. Tampoco dejes que te atrape el pánico y esperes estresarte desde el primer minuto, ¡eso sería aún peor! Debes aplicar el criterio de realidad y pensar que debes llegar con las pilas puestas para poder enfrentar los desafíos que tengas de buena manera.
Más que pensar en cómo será tu primera semana o mes de vuelta, mejor preocúpate de disfrutar el presente. Medita, y piensa en qué cambios debes hacer en tu vida para llegar mejor de lo que te fuiste. Piensa que cualquier peldaño que logres subir en la escala de la felicidad es un gran paso. No es necesario que seas una persona completamente distinta: basta con que seas mejor que la anterior.
- Ordena tus ciclos biológicos
Todos nos damos pequeños permisos en vacaciones. Quizás para dormir siesta todos los días, o para hacer maratones de esas series que teníamos pendientes y quedarnos viéndolas hasta las 4 am. Podría ser también que no te dieron ganas de despertarte a desayunar y pasaste de largo hasta el almuerzo (¡o cena!). Sin responsabilidades con el trabajo a veces los horarios se pierden un poco y, ¡está bien! Pero recuerda comenzar a ordenarte para llegar con la mejor disposición a tus primeros días de vuelta en la oficina.
Si has estado pasando por ese estado de relajo en que los horarios no importan mucho, te recomendamos que unos días antes de volver te propongas ordenar tus ciclos biológicos para que tu cuerpo responda de la mejor manera posible al cambio de rutina. Empieza a ordenar tus comidas y horas de dormir, para que las levantadas temprano no te pillen de sorpresa.
No olvides que tu cuerpo funciona mejor cuando está todo en sincronía. ¡Escúchalo! Trata de comer alimentos que sean buenos para tu cuerpo, que te den energía. Toma mucha agua y hazlo varias veces durante el día. Incorpora el ejercicio a tu rutina si es que aún no lo has hecho. Duerme las horas que necesites para estar bien y procura tener las condiciones necesarias para un sueño reparador. Tu cuerpo te ayudará a enfrentar mejor el nuevo año laboral si es que tú le das una mano primero.
- Prepara algo nuevo que te emocione y haga la vuelta distinta
Hay que estar listo de distintas formas para enfrentar un nuevo año laboral. Por eso, algo que puede ayudar a levantar tu ánimo y hacer que el regreso sea un poco más emocionante, es ir de compras (online o presencial, ¡lo que prefieras) o que te des un momento especial para preparar algo distinto. La idea es que incorpores algo que te de alegría para el nuevo periodo que vivirás.
¿Qué podría ser? Tenemos algunas ideas para ti. Si eres de los que disfruta de la ropa y preparar atuendos, puedes ir de compras para llegar con nuevas tenidas para el año. Si prefieres más las cosas del tipo papelería, puedes ir por una libreta, estuche… cualquier cosa que te emocione que caiga dentro de esta categoría. O si eres más del tipo que le disfruta la tecnología, también puedes adquirir alguna herramienta nueva que te ayude en tu desempeño diario. Puede ser algo pequeño como nuevos audífonos, hasta algo grande, tipo Tablet.
Si no quieres gastar dinero, entonces puedes pasar un tiempo planificando algo que te haga sentir bien. Por ejemplo, puedes preparar qué llevarás de menú las primeras semanas, o tus snacks para cada día. También puedes armar unas playlists para levantar tu energía mientras trabajas. ¡Usa tu creatividad!
- Cierra tus vacaciones con algún rito importante para ti
Y sí, todo tiene que llegar a su fin, incluso las vacaciones. Así que es importante cerrarlas con broche de oro para volver a trabajar con la camiseta puesta.
Dar término a tus vacaciones de buena manera te ayudará a cerrar un ciclo y prepararte para el siguiente. Nuevamente te invitamos a usar tu imaginación y preguntarte, ¿qué es lo que te haría más feliz? Quizás es pasar un tiempo de soledad reflexionando sobre tu vida, salir a comer con amigos para disfrutar. Tal vez quieres escribir, o tener una conversación especial con tus seres queridos. El objetivo es agradecer los buenos momentos y estar listo para lo que viene.
¿Qué te parecieron estos consejos? ¿Crees que eres capaz de realizarlos? Te invitamos a seguir leyendo para que conozcas los pasos a seguir una vez que vuelvas a la oficina y así mantengas el estrés a raya.
Para hacer al volver al trabajo: 4 claves que debes seguir para no estresarte de más
Y llegó el día: debes levantarte temprano a la oficina para trabajar. Si seguiste los pasos anteriores, entonces ya tienes bastante camino avanzado para no tener ansiedad excesiva en este retorno laboral. Ahora, lee con atención los consejos que vienen a continuación, para que puedas disfrutar de unas buenas primeras semanas de proyectos.
- Has una lista de pendientes y ordénala según prioridad
Sabemos que volver al trabajo puede tener tantos “por hacer” que puede ser abrumador. Tanto así, que muchas personas simplemente comienzan a ejecutar sin antes pensar dónde deben poner mayor énfasis. ¿Te suena familiar? Llegas a la oficina y te están bombardeando de información y tareas desde antes que te sientes, cosa que cuando finalmente llegas a tu puesto te pones a revisar lo primero que aparece en tu mente en vez de lo más urgente e importante. ¡Tranquilidad! Sabemos que la ansiedad es mucha, pero lo primero es lo primero.
Por esto, abre en tu pc el programa que uses para organizarte o, si eso no te acomoda, usa el tradicional papel y lápiz y anota absolutamente todo lo que tengas por hacer. ¿Un reporte de estados financieros? Anótalo. ¿Un correo largo y detallado? Anótalo. ¿Una llamada que solo tomará 3 minutos? Por supuesto que anótala. La idea es que escribas hasta el último detalle de lo que tengas que hacer. Incluso, si te motivas, te recomendamos que escribas al lado de cada tarea el tiempo que creerás que te tomará completarla.
Una vez que tengas todo escrito, puedes utilizar el método de preferencia para otorgar prioridad. Usa destacadores, pon puntajes, dibuja estrellas al lado… haz lo que más te acomode para entender y esquematizar cuáles son las tareas más urgentes e importantes.
Con todo esto hecho, podrás elegir las tareas más importantes y ponerlas en orden para completarlas durante los primeros días. ¡La clave está en la organización! Este plan te ayudará tener claridad de mente para poder ver cómo se esquematiza tu trabajo, evitando estrés laboral a la vuelta de tus vacaciones. ¡Compruébalo!
- Anticípate a lo que viene al mes completo
Cuando vuelvas de tus vacaciones, te recomendamos que no solo visualices el primer día, si no que te proyectes un poco más allá y trates de tener claridad sobre cómo será tu primer mes de vuelta, o incluso, los primeros tres meses.
El tener el panorama claro sobre qué es lo que viene más adelante te ayudará a enfrentarlo mejor y bajar tus niveles de ansiedad. La idea no es que imagines escenarios, sino que realmente te planifiques a lo que será la primera temporada de vuelta.
Si es que aún no lo has hecho, te recomendamos que realices una planificación que incluya metas logrables a un corto y largo plazo, y que tengas los medios claros para lograrlos. Estamos hablando de metas personales, que sean lo que tú quieres lograr a nivel laboral, más allá de lo que se te exija en tu compañía. El plantearte objetivos personales (¡que sean realistas!) también ayudará a nivelar el estrés, y a darte ánimos para empezar tus días con metas claras. ¡Ánimo! Te prometemos que se puede y hará tus días más tranquilos.
- Programa un encuentro social con tus compañeros de trabajo para volver con las pilas cargadas
¡Porque no todo tiene que ser trabajo! Habla con tu equipo y propón una junta para ponerse al día, bromear y relajarse. Una primera semana de trabajo puede ser increíblemente pesada si no te das espacios para ti y tus compañeros.
Puede ser algo tranquilo como un almuerzo (¡o un desayuno si es que el tiempo lo permite!), o una salida tipo happy-hour. Pueden ir por unas pizzas o hamburguesas. O, si se animan, siempre está la opción de hacer un asado de fin de semana o ir a cantar un buen karaoke. Lo importante es que sea una actividad que los saque de la rutina y los haga sentir esa sensación de relajo tan importante para rendir bien.
Si el equipo está un poco melancólico por la vuelta a la oficina, una instancia como esta hará que el ánimo se levante y tengan un par de anécdotas grupales para recordar esas primeras semanas que pueden ser un poco pesadas.
- Preocúpate de mantener un espacio para algún pasatiempo
Y porque no todo en la vida es trabajo, es de vital importancia que mantengas un tiempo para realizar tus hobbies o actividades que más te gusten. Sabemos que a veces es más fácil decir que hacer, pero en este punto no puedes tranzar. El tener un espacio personal que se trate de tus intereses personales es crucial para mantener una buena salud mental, lo que – a su vez – repercutirá en tu desempeño laboral.
Busca tomar alguna clase, inscríbete al gimnasio o realiza ejercicio por tu cuenta, cocina, aprende un nuevo idioma, ten una noche a la semana con amigos para jugar juegos de mesa, guarda tiempo para tus series favoritas… ¡las posibilidades son infinitas! Lo importante es que tengas un tiempo para relajarte, bajar el estrés, y dejar el trabajo fuera de tu mente por un rato.
¡No te dejes de lado! Asegúrate de que tengas este espacio desde el primer día de vuelta y haz todo lo posible por mantenerlo. Verás como esto hará que tu vuelta al trabajo, y también durante lo que quede del año, sea mucho más amena, incluso en los momentos en que estés bajo mayor presión.
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